Nov 13, 2019
Cuando termino una colección siempre me pregunto ¿Qué me inspirará a crear la siguiente?, porque a través de mis piezas no solo se manifiesta mi parte creativa, sino mi lado más humano. Con ellas trato de contarles mis historias, mis creencias, lo que para mí es importante, tratando de que a su vez, ustedes puedan hacerlas suyas a su manera, dentro de sus propias historias, sus propias creencias y su propia vida.
Así me sucedió con Colibrí que fue mi “Mensajero de Dios” y que se convirtió en el mensajero de muchas y muchos de ustedes.
Para algunos, ese significado no lo tenía el Colibrí sino otro símbolo que pudo ser un ave, una flor o una libélula. El hecho es, que a través de mi historia muchos se identificaron y me compartieron la suya y hoy por hoy sigo recibiendo bellas fotos y mensajes con imágenes hermosísimas de Colibríes.
Luego vino “Amor Incondicional”, esta palabra inscrita en una medalla que fue mi forma de expresar del modo más sencillo el amor puro y genuino que siento por mi hija y que sé que las madres sienten por sus hijos. Y esta Edición Especial ustedes también la hicieron suya y yo aprendí de ustedes porque muchas mamás la tienen, pero no solo mamás, también hijas, mamás perrunas, gatunas, mejores amigas quienes me enviaron sus mensajes dejándome saber que el “Amor Incondicional” es eso… amor sin condiciones desde y hacia cualquiera que lo albergue en su corazón.
Después vino NUMB3RS, una colección tan infinita como infinitos son los números, llena de significados, recuerdos, momentos y fechas especiales. Con ella supe que todos teníamos un Número de Trayectoria de Vida -que en mi caso es el 3- y su significado no podía parecerse más a mí; y de esta misma forma mi alegría al saber la sorpresa de tantos que se han identificado con su número, o que han querido obsequiar algún o algunos números que representen recuerdos o personas importantes en su vida.
Cuando NUMB3RS estuvo lista, empecé a preguntarme de qué trataría mi próxima colección. Justamente en ese momento (hace un año) a mi familia y a mí se nos presentaba una de las situaciones que nos cambiaría totalmente la vida: EMIGRAR.
Un año de cambios, adaptaciones, subidas y bajadas, de trabajo paralizado porque nunca es fácil volver a empezar, organizarse, crear rutina, empezar de cero; pero una noche, caminando bajo la luna llena y un cielo lleno de estrellas llegó esa inspiración que tanto esperaba y se volvió a encender la chispa de lo que tanto me apasionaba con un pensamiento que vino a mi mente: “Que nadie te diga que el cielo es el límite cuando existe una galaxia entera por descubrir”
Trabajar incansablemente por lograr mis metas es algo que siempre he hecho y entendí que siempre se puede hacer y dar más. No hay límites, más que los que nos ponemos a nosotros mismos; y siempre hay algo más que podemos lograr.
De eso se trata Galaxy, de recordarnos que más allá de lo que creemos siempre hay nuevas cosas maravillosas que con amor, trabajo, dedicación y esfuerzo podemos alcanzar.